Hay Consulting, en colaboración con una compañía alemana, llevaron a cabo una investigación en el año 2011, en la que analizaban las tendencias que afectarían a las organizaciones en las próximas décadas y, en consecuencia, definieron las competencias y características que necesitarán desarrollar los directivos para poder dar una respuesta adecuada a las mismas.

De su análisis se concluye que los futuros directivos necesitarán:

  • Dirigir a través de la influencia, en vez de hacerlo a través de la autoridad.
  • Utilizar un mayor pensamiento estratégico, ya que la estrategia organizativa no estará sólo en manos de los dos o tres que están a la cabeza de las Organizaciones, sino que bajará a lo largo de toda la estructura organizativa.
  • Ser multilingües, flexibles, sensibles a la diversidad cultural y con movilidad internacional para afrontar el incremento de globalización.
  • Actuar como verdaderos agentes de cambio y ser muy colaboradores con otras organizaciones, para dar respuesta a las crecientes exigencias de equilibrio entre el éxito financiero, la responsabilidad social y el cuidado medioambiental. Comprender, dirigir, integrar y motivar a equipos con una cada vez mayor diversidad, promoviendo la diversidad intergeneracional e intercultural en el trabajo en equipo.
  • Adaptar sus organizaciones para atraer, integrar y desarrollar en sus equipos directivos a más mujeres y otras minorías. Equilibrar su rol de jefe, mediador y coach, dando a sus equipos más libertad y autonomía sin perder el enfoque hacia los objetivos. Trabajar más duro para generar lealtad personal, acomodándose a las necesidades de su gente, permitiendo formas de trabajar autodirigidas y llevando a cabo una gestión individualizada con los miembros de su equipo. Acoger la creatividad, curiosidad y apertura mental de los “nativos digitales”, ofreciendo guía y marcos de actuación cuando sea necesario.
  • Aprender a dirigir en la distancia, pero sin confiar únicamente en la comunicación virtual.
  • Promover una elevada transparencia, integridad y sinceridad para preservar la reputación de la Compañía en un mundo cada vez más transparente a través de las redes sociales.